La cotización del USD/JPY se mantiene en un punto crucial, influenciada por factores económicos y expectativas del mercado. Analizamos su comportamiento reciente y proyectamos su posible dirección en la semana entrante.
El par USD/JPY, que representa la relación entre el dólar estadounidense y el yen japonés, ha experimentado una semana de fluctuaciones moderadas, marcada por un contexto de liquidez reducida debido a las festividades navideñas. El 22 de diciembre, el par se mantuvo justo por debajo de la media móvil de 200 días (200-DMA), oscilando entre 141.88 y 142.66, con un cierre en Nueva York de 142.46. Esta estabilidad sugiere una resistencia alrededor de 142.69, marcada por la media móvil descendente de 55 horas (55-HMA) y un rango de nube Ichimoku entre 142.41 y 142.98.
El 25 de diciembre, el análisis de Techmantle resaltó la estabilidad del par alrededor del nivel de 142.45, atribuyéndolo a la reticencia de los inversores y a la casi inexistente liquidez durante las vacaciones. Esta observación es consistente con la tendencia de cierre del 24 de diciembre, donde el tipo de cambio oficial cerró en 1 USD = 142.45 JPY, con un máximo de 142.54 JPY y un mínimo de 142.36 JPY.
Desde una perspectiva técnica, el par mostró un ligero aumento del 0.24% el viernes a 142.44, concluyendo la semana con un incremento total del 0.21%. Este comportamiento sugiere una resistencia constante frente a los factores externos.
Desde un enfoque fundamental, el pronóstico del par USD/JPY para la próxima semana debe considerar diversos factores. Datos recientes del sector de la vivienda en Estados Unidos proporcionan una visión de la economía del país, mientras que las decisiones y comentarios del gobernador del Banco de Japón, Ueda, podrían influir significativamente en la dinámica del yen japonés. Estos elementos combinados ofrecen un panorama complejo, donde las políticas monetarias y los indicadores económicos de ambas naciones juegan un papel crucial.
Para la próxima semana, se espera que el USD/JPY continúe su tendencia de estabilidad, con posibles fluctuaciones moderadas. La atención de los inversores estará dirigida a las declaraciones de políticas monetarias y a los indicadores económicos clave. La resistencia técnica en torno a 142.69 y el soporte en niveles cercanos a 142.36 podrían definir los rangos de operación. Sin embargo, es importante considerar la posibilidad de movimientos inesperados, dada la naturaleza impredecible de los mercados financieros y los efectos residuales de la temporada festiva.